De novato a experto ¿Qué camino debería seguir?

Benner: “la experteza sólo puede adquirirse mediante la práctica continuada y reflexiva”.[1]

La Fisioterapia es una profesión joven, la existencia de casi 45000 colegiados en España con una amplia presencia en todos los ámbitos de actuación sanitaria, supone la existencia de expertos dentro de la profesión, fundamentalmente en el campo asistencial,  que según datos de la encuesta realizada por el CGCFE en 2011 [2], representa cerca del 90% de la dedicación laboral del colectivo profesional respecto a ámbitos competenciales como la gestión, la docencia y la investigación. Pero:

¿Cuál ha sido,  el camino dentro del campo asistencial, para dejar de ser novatos y llamarse expertos? Quizás la gran variedad de formaciones y formas de entender la profesión, hace que hoy en día la “experteza” aún no esté normatizada y establecer dominios o categorías más allá del título de diplomado o graduado sea difícil de estandarizar.

Debemos recordar que las competencias profesionales, sin especialidades  en ciencias de la salud según la LOPS, terminan en el grado universitario. La formación continuada a día de hoy tiene la finalidad de  aumentar el nivel de desempeño y desarrollo de las mismas en situaciones de mayor complejidad. Por ello quizás sea inteligente y maduro leer lo que algunos hayan hecho ya y que les está sirviendo para progresar al hablar de profesional cualificado o progresión eficiente dentro ámbito competencial:

Según Le Boterf [3]: “la competencia resulta de un saber actuar, pero para que se construya se tiene que poder y querer actuar; la progresión competencial implica saber combinar un doble equipamiento: los recursos incorporados a la persona (conocimiento, saber hacer, cualidades, experiencia…) y los elementos de su propia experiencia (medios, red relacional, red de información). Las competencias producidas con los recursos propios se materializan en actividades y conductas profesionales adaptadas a contextos singulares” .

Kane a su vez determina que un profesional es competente en la medida que: “utiliza sus conocimientos, habilidades, actitudes y el buen juicio asociado a su profesión, para desenvolverse de forma eficaz en las situaciones que corresponden al campo de su práctica” [4].

En la década de los 80, Los profesores Hubert y Stuart Dreyfus [5] plantearon el  Modelo de Adquisición de Habilidades (MAH). Este modelo describe el proceso de evolución hacia la “expertez” a través de la aplicación de los conocimientos teóricos primero, y de la acumulación, el análisis y la discriminación de experiencias vividas, después.

El esquema de Dreyfus, supone la adquisición de competencias en un ámbito determinado y requiere un paso exitoso por los cinco estadios durante el período de formación:

Este sistema de categorización del aprendizaje se ha aplicado a profesiones de distintos ámbitos: enfermeras,  médicos, jugadores de ajedrez u operadores informático y todos, la utilización de la práctica (learning by doing) es el eje y enganche de cómo hacer el paso de un estado a otro como profesional, donde la competencia se desarrolla en el ámbito de la práctica en  que el profesional desarrolla su actividad. ¿Teniendo en cuenta la cantidad de práctica asociada al proceso de enseñanza-aprendizaje de la Fisioterapia, tendría cabida este modelo en nuestra profesión?

Desde un punto de vista de profesión sanitaria la respuesta es sí, pero la gran dispersión de la realidad laboral en pequeños centros y un 75% de fisioterapeutas en la sanidad privada, según la misma encuesta (CGCFE, 2011) en contraste con los datos de médicos y enfermeras, hace difícil trasladar esta progresión formativa basada en estándares de calidad por falta de homogeneidad en los diferentes campos. Aún así el progreso necesita de esos estándares para diferenciar la calidad de la réplica y la evolución de la copia, no en vano todos somos fisioterapeutas.

Reflexionando acerca de la utilidad de este enfoque en la formación en Fisioterapia, en torno a la comprensión de las acciones didácticas y evaluativas necesarias para garantizar la transición de nuestros aprendices al grado de expertos y situando la simulación clínica y los diferentes tipos de razonamiento clínico en la realidad de la atención sanitaria, podríamos sugerir que:

Dentro de la atención Biopsicosocial, si el novato actúa de forma mecánica, limitada y bastante inflexible, fruto de su inexperiencia y sus expectativas formativas en lo BIO; quizás utilizar el razonamiento clínico hipotético-deductivo sería lo más eficiente y la transmisión por métodos conductivistas (guiado por expertos) la forma didáctica más solvente.

En la progresión del principiante hacia los estadios de competente y diestro de Dreyfus, con mayor  conocimiento relacional adquirido (causa-efecto) y el establecimiento de normas o reglas predictivas, el razonamiento clínico inductivo podría ser aquel que permita llevar al profesional mediante formación práctica o simulación clínica, al nivel de experteza y perícia [6], que le permita desarrollar el razonamiento clínico narrativo y las técnicas de hands off (técnicas de mayor exigencia en el dominio clínico, situacional y reconocimiento del límite competencial) sobre los casos más complejos, (policlínicos y de larga evolución) con una dominancia en lo PSICO Y SOCIAL respecto a lo BIO. En todos estos casos los sistemas constructivistas de aprendizaje, podrían ser más eficaces al aprovechar la propia experiencia como catalizador activo para el trabajo en equipo y la progresión del colectivo profesional.

Rafel Donat i Roca
Profesor Estudios de Fisioteràpia EUCS Manresa

Referencias

[1] Benner P. From Novice to Expert. 2ª ed. Berna: Hans Huber; 1997.

[2] CGCFE [internet] Madrid 2011. Datos sobre Estado de la profesión en España. Disponible en: http://www.fisioterapeutes.cat/comunicacio/pdf/assembleaCGCFE_nov2011_especialitats.pdf

[3] Le Boterf G. Ingeniería de las competencias. Barcelona: Gestión; 2000.

[4] Kane MT. The assessment of professional competente. Edu&Healt Professions 1992; 15:163-182.

[5] Dreyfus H, Dreyfus S. Mind over machine: The power of human intuition and expertise: New York; Editorial Routledge; 2001.

[6] Sackett DL, Rosenberg WMC, Gray JA, Haynes RB, Richardson WS. Evidence-based medicine: what it is and what it isn’t. BMJ 1996; 312: 71-72.

2 Replies to “De novato a experto ¿Qué camino debería seguir?

  1. Como estudiante y algun dia novata necesitare personas como Rafael y otris profes para enruquecerme de su saber y ser una novata con criteri

    1. Gracias Encarna por tus comentarios. Será un placer acompañarte en tu trayectoria como profesional o en función del ámbito que decidas escoger para desarrollarte como fisioterapeuta,.guiarte hacia aquellos compañeros que puedan ser mejores acompañantes en el desempeño.

      Saludos

      Atentamente

      Rafel

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